Los sitios web y servicios modernos tienen dos “capas” en su desarrollo: una interfaz para la interacción con usuarios y una parte trasera para acciones técnicas. Los clientes interactúan con el frontend, mientras que el backend, que está oculto, procesa las solicitudes del frontend. Cada uno está escrito según diferentes principios y en diferentes lenguajes. Exploremos cuál es la diferencia entre ambos y cómo interactúan entre sí.
Imagina un coche sin carrocería. Claro, al tener motor, chasis y ruedas, técnicamente puede conducirse, pero sería muy incómodo; no se puede ir lejos sin un techo, puertas y asientos cómodos. El frontend funciona de forma similar. Es el casco exterior del sitio o aplicación web que los usuarios ven y con lo que interactúan. Si no hubiera interfaz, los usuarios verían un código ininteligible.
El frontend es la parte de la aplicación web que los usuarios ven y con la que pueden interactuar. Esto incluye el diseño y el menú de navegación. En el frontend también se decide cómo mostrar los textos, las imágenes y el contenido multimedia a los usuarios.
En la construcción de un sitio web suele trabajar un equipo de desarrolladores y diseñadores: un desarrollador backend para crear la infraestructura que permite que un sitio web maneje solicitudes de datos; un diseñador para dibujar el diseño de la página, pensando en la ubicación de los botones, imágenes y texto; y un desarrollador frontend para darle vida al diseño por medio de código.
Para ello realiza las siguientes tareas:
Diseña páginas, agrega texto, imágenes, botones, íconos, ventanas emergentes y chats.
Hace que el sitio sea interactivo: comprueba que todos los botones funcionan, que los enlaces conducen a las páginas correctas y que las ventanas emergentes se muestran en la parte correcta de la página.
Configura la compatibilidad entre navegadores para que el servicio se vea igual de bien en los diferentes dispositivos.
En esencia, el frontend es un término medio entre crear y editar gráficos, y crear la experiencia de usuario de una aplicación web mediante la programación de su interfaz.
Ahora imagina que compras un celular nuevo, ese que acaba de salir al mercado y está de moda porque es bonito y causa buena impresión en las reuniones sociales. Pero al intentar hacer una llamada, resulta que el teléfono no responde, que al final sólo es bonito pero cero funcional.
Así es como se vería cualquier aplicación web sin un backend. El backend es lo que hace que la interfaz sea interactiva; es responsable de la interacción del usuario con los datos internos que muestra el frontend. Por tanto, la principal tarea del backend es procesar la solicitud del usuario mediante una base de datos y proporcionar una respuesta con la información requerida.
Generalmente, la lógica del proceso interno de cualquier servicio se reduce a cuatro etapas:
Obtener datos de un usuario. Supongamos que el usuario planea un viaje a la playa por sus vacaciones de verano. Va al buscador y busca “boletos de avión a Los Cabos”, a lo que el servidor recibe inmediatamente la solicitud y pasa al siguiente paso.
Procesar los datos. El servidor del motor de búsqueda consulta la base de datos para procesar la solicitud. Esto se realiza a través del backend, a diferencia de los otros pasos, que funcionan desde el frontend.
Recibir una respuesta del servidor. Cuando el servidor ha encontrado la información sobre la solicitud del usuario, la traduce a un lenguaje comprensible para las personas.
Traducir la respuesta para mostrarla al usuario. Una vez traducida la respuesta, el servidor muestra los resultados en la pantalla.
Pero el backend no sólo consiste en codificar, sino en crear la arquitectura de los sitios web. Aunque las responsabilidades del desarrollo backend pueden variar según el campo de actividad o el producto de TI que se crea, es importante que cumpla las siguientes tareas:
escribe código para garantizar el funcionamiento de un sitio o aplicación web;
trabaja con bases de datos;
configura la API (interfaz de programación de aplicaciones) para la comunicación con servicios externos;
piensa en cómo hacer que el servicio sea confiable y cómo escalarlo.
HTML y CSS. El lenguaje de marcado de hipertexto (HTML) y las hojas de estilo en cascada (CSS) son la base del código. Sin ellos, en lugar de una página web, se mostraría en la pantalla un lienzo de texto en blanco y negro, y sería imposible agregar imágenes o cambiar el color de fondo. HTML permite crear la estructura de la página y CSS estilos, es decir, cómo se verían los encabezados, leyendas, tablas y gráficos. Por lo tanto, antes de comenzar una carrera en desarrollo web, es necesario dominar los conceptos básicos de ambos; pero una vez que lo hagas, te será posible crear sitios web sencillos de una manera estándar y programática.
JavaScript (JS). Este lenguaje de programación se utiliza para crear interfaces, mapas, aplicaciones y juegos en línea complejos. Gracias a las capacidades de este lenguaje, la página no se carga nuevamente cada que el usuario hace una acción en la pantalla; JavaScript está detrás de la parte interactiva de los sitios web. En el frontend, se utiliza para crear animaciones, formularios emergentes, autorrelleno y otros elementos dinámicos.
Frameworks de JavaScript. Los frameworks son simplemente necesarios para implementar proyectos grandes; de hecho, son plantillas listas para escribir código. Estudiarlos lleva tiempo, pero al final ayudan a reducir al mínimo la cantidad de trabajo. Los desarrolladores de aplicaciones web para el usuario suelen utilizar Angular, React, Vue.js, Backbone y Ember, entre otros.
Git y sistemas de control de versiones. Saber utilizar Git es un requisito para casi cualquier trabajo de desarrollo web, ya sea frontend o backend. Por suerte, en el curso de desarrollo web de TripleTen, los estudiantes aprenden a trabajar en el sistema de control de versiones Git, a escribir código en HTML, CSS y JavaScript, y a facilitar el desarrollo y mantenimiento de interfaces complejas.
Java. Java es un lenguaje de programación multiplataforma compatible con la programación orientada a objetos (POO). En la programación orientada a objetos, todo el trabajo se realiza a través de objetos. Estos objetos se describen en forma de código y aprenden a interactuar entre sí. Java se utiliza en el desarrollo web y móvil, y es adecuado para crear aplicaciones y sistemas seguros y confiables.
Python. Python es adecuado para desarrolladores backend principiantes debido a su sintaxis simple. Funciona con diferentes plataformas y sistemas de software. Se utiliza en muchas áreas, desde el aprendizaje automático hasta la creación de juegos. Python es conciso, es decir, que funciona muy bien para completar tareas con menos código.
PHP. PHP es un lenguaje de programación de código abierto. Se utiliza con mayor frecuencia para crear aplicaciones web. Funciona bien con bases de datos y es compatible con los sistemas operativos más populares (Windows, Linux y macOS).
Golang (Go). Otro lenguaje de programación simple para el backend. Go es adecuado para crear partes individuales de un sistema que realizan una función específica, y que juntas forman un sitio o aplicación web completos.
Otros lenguajes de programación/script para backend menos populares son C#, C++, Ruby y Swift. De acuerdo con la encuesta a desarrolladores 2023 de StackOverflow, menos del 30% de los desarrolladores en el mundo los utilizan.
Los desarrolladores frontend trabajan de la mano con diseñadores y maquetadores para crear un producto con el que el usuario se sienta cómodo. No obstante, al hablar del desarrollo de aplicaciones y sitios web se necesitan ambos, frontend y backend. Suelen estar conectados de la siguiente manera:
El usuario hace algo en el frontend. Por ejemplo, presiona un botón.
El frontend envía la información sobre esta acción al backend.
El backend procesa la información. Por ejemplo, si el usuario hizo clic en el botón “Agregar al carrito”, se crea un carrito de compras para él y se calcula el precio del pedido con entrega.
El backend devuelve la información al frontend.
La interfaz “dibuja” una imagen clara para el usuario: una página del carrito de compras con el costo del producto y la entrega.
Sin un backend, el frontend no podrá funcionar: el usuario hará clic en el botón, pero no sucederá nada. Por tanto, los desarrolladores frontend y backend siempre trabajan juntos.
Mientras que el frontend funciona para el usuario, el backend funciona en el servidor y envía solo el resultado del trabajo al usuario. El código backend no se envía directamente al navegador del usuario, por lo que es imposible de ver, pero este se ejecuta en el servidor en el que está almacenada la aplicación web.
Existen otras diferencias notables entre frontend y backend:
Frontend | Backend |
Interactúa directamente con el usuario final. Uniforme. Casi todos los desarrolladores frontend trabajan con una combinación de tecnologías HTML+CSS+JavaScript. Los idiomas, funciones y herramientas de trabajo cambian con frecuencia, por lo que se necesita actualizar conocimientos y habilidades constantemente. Umbral de entrada bajo. Las herramientas que se necesitan de inicio son bastante fáciles de aprender. Trabaja más estrechamente con diseñadores, especialistas en marketing y gerentes de producto. | Proporciona funciones lógicas necesarias para el funcionamiento de la aplicación web. Diverso. Es posible escribir en casi cualquier lenguaje de programación, y proporciona acceso a tecnologías sofisticadas como el aprendizaje automático y el análisis de datos. Estable. Rara vez se producen cambios radicales. Umbral de entrada alto. Para empezar a trabajar como backend, es necesario comprender las matemáticas, las bases de datos y los algoritmos. Los desarrolladores backend interactúan más con analistas, gerentes de producto y desarrolladores frontend. |
El desarrollo frontend es para personas que:
Les gusta comunicar al público sobre el producto.
Les gusta ser testigos de los resultados de su trabajo.
Están dispuestos a actualizar conocimientos de forma constante y exhaustiva.
Por otros lado, el desarrollo backend es para personas que:
Prefieren una programación más técnica y matemáticamente compleja, lista para comprender algoritmos.
Están preparados para que el resultado de su trabajo no sea visible.
Quieren tener más opciones entre las herramientas que dominan, como lenguajes de programación, y en sus áreas de actividad.
Aunque también existen los llamados desarrolladores Full-Stack, que trabajan frontend y backend al mismo tiempo. Esto requiere más información, pero te permite escribir para ambas partes de a aplicación web de forma completamente independiente. A menudo sucede que los desarrolladores novatos se convierten en Full-Stacks porque de esta manera pueden ver el trabajo desde todos los puntos.
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